A principios de año, publicamos en este suplemento el primer contacto que tuvimos con el Kia Soul, en la presentación internacional que si hizo en Miami. En aquél momento, destacamos la búsqueda de la marca coreana en materia de innovación estilística, ya que sus productos habían demostrado en los últimos años una clara superación respecto de la calidad de fabricación. Ahora, con el Soul en el país, volvemos a probar este modelo por nuestros caminos y con referencias exactas de la configuración que se ha elegido para el mercado argentino.
Primero hay que volver a hablar de la arquitectura de este Soul. Sin dudas es un auto distinto, tanto que es difícil poder ubicarlo en algún segmento. Su figura está a mitad de camino entre un modelo convencional y pequeño 4x4. Su diseño se vuelve más original por la poca superficie vidriada que tiene, especialmente en el sector trasero. Todo esto luce más con las enormes cubiertas de 18 pulgadas que lleva la versión Rock, la más equipada de la gama. La cantidad de personas que se dieron vuelta a mirar pasar el Soul durante los días de prueba ratifican su condición de auto diferente.
También es para destacar su nivel de equipamiento, con elementos de seguridad y de confort propios de un vehículo de alta gama (ver ficha técnica).
El espacio interior es óptimo, tanto en las plazas delanteras como en las traseras. Aunque estas últimas no cuentan con un sistema de desplazamiento longitudinal, que le vendría muy bien para ampliar el pobre espacio de carga que ofrece el baúl (220 dm3, menos que un Ford Ka, que tiene una capacidad de 265 dm3).
El único motor que se ofrece es un naftero de 1.6 litro y 124 caballos. La respuesta de este propulsor es acorde al estilo urbano del Soul: su rendimiento es "plano" en su abanico de revoluciones.
El precio del Soul es complicado de analizarlo. La gama arranca en US$ 22.900 y la versión Rock cuesta US$ 30.900. Es cierto que por ese valor uno podría acceder a, por ejemplo, un Peugeot 407. Pero no sólo que el Soul no está destinado a potenciales compradores. Sino que apunta a aquellos que buscan diferenciarse del resto Y eso tiene su precio.
Fuente:http://www.clarin.com
Fecha:20/08/2009
No hay comentarios:
Publicar un comentario