viernes, 28 de diciembre de 2007

BMW X6


Todavía no hay datos sobre su precio final pero sí sobre las novedades que incluye de serie, como el sistema Dynamic Performance Control, que sirve para mejorar la estabilidad o los dos nuevos motores de gasolina, entre los que destaca el V8 4.4L de 400 CV, el motor más potente jamás usado en un serie X de BMW.

MADRID.-Está claro, cuanta más variedad, mejor. Ahora BMW ha creado un nuevo segmento llamado Sports Activity Coupé (SAV) que es una categoría en la que se fusionan dos conceptos opuestos: los coupés y los todocaminos. El primer vehículo nacido de este experimento es el BMW X6, se ofrecerá con 4 motorizaciones y será presentado en el próximo Salón de Detroit.

Desde luego, el coche no pierde la esencia de BMW y su imagen recuerda a la de un X5 pero con todas sus líneas suavizadas. Si miramos el frontal, vemos que no cambia en gran cosa con su antecesor, excepto los faros antiniebla que aparecen algo más abajo. Otra diferencia es que la distancia libre con respecto al suelo es menor y sobre todo, que el techo desciende de forma pronunciada desde las plazas delanteras, algo típico de los coupés.

En el diseño exterior, se han mezclado las zonas cóncavas con las convexas, así se juega con luces y sombras para dar una sensación de fluidez. También se han exagerado los pasos de rueda, que ofrecen un marcado abombamiento para proteger a unas llantas de aleación de 21 pulgadas con radios en forma de Y.

El frontal sigue siendo marca de la casa, con la parrilla y los faros dobles. El capó sigue conservando unas formas definidas y tiene unos nervios muy marcados que convergen en forma de cuña hacia la zona delantera. Los paragolpes son del mismo color que la carrocería y están provistos de aplicaciones de material sintético. Asimismo, para acentuar el carácter deportivo, el BMW X6 carece de pilar B, generando así una imagen más dinámica

Llama la atención la zaga, que no tiene ese corte vertical característico del X5 y que es la culminación de la caída del techo; en consecuencia, la ventana trasera es más estrecha; además, incorpora un filamento alargado en la parte superior con tecnología LED como ayuda a los señalizadores de frenada. También se han incorporado protectores de los bajos en la parte delantera y trasera fabricados en aluminio pulido.

Para terminar con el apartado externo, decir que BMW ha optado por un color oscuro para resaltar el contraste con los umbrales de las puertas, las varillas cromadas, los faros antiniebla enmarcados, las entradas de aire y los dos tubos de escape. Sin duda, el aspecto del coche es imponente.

Una vez en el interior, el BMW X6 se muestra espacioso y elegante. La tapicería es de cuero y el salpicadero tiene una superficie almohadillada a la altura de las rodillas para evitar golpes en las frenadas. El volante incluye levas para manejar cambios de marcha y otras funciones, y el maletero tiene una capacidad de 570 litros que se puede aumentar abatiendo los asientos traseros.

Tampoco se queda corto en cuanto a equipamiento porque incluye de serie todos los adelantos que se le suponen a un coche de su categoría, como por ejemplo, el mando i-Drive que sirve para controlar los sistemas de navegación, climatización, entretenimiento, etc. Para las plazas traseras, la distracción viene en forma de pantalla de DVD plegable que se ubica entre los dos asientos delanteros.

Dynamic Performance Control

Además de la tracción a las 4 ruedas que viene de serie en todas las versiones, el X6 estrena el Dynamic Performance Control; que es un sistema que distribuye el momento de propulsión entre las dos ruedas del eje posterior y que, según sus creadores, es el único del mundo capaz de aumentar la estabilidad del coche tanto en fases de aceleración como de frenada.

Por ejemplo, si el coche tiende a sobrevirar en una curva, automáticamente se varía el empuje entre las ruedas; de esta forma, la capacidad de tracción siempre es la más óptima.

Dos motores nuevos

El vehículo se va a ofrecer con 4 motorizaciones, dos diésel y dos nuevos de gasolina. De estos últimos, destaca el V8 4.4L, con tecnología Twin Turbo e inyección directa de gasolina, que genera 400 CV de potencia y un par motor de 600 NM entre 1750 y 4500 r.p.m, o dicho en otras palabras, el motor más potente jamás metido en un serie X de BMW. Esta versión se denomina X6 xDrive 50i.

Queda entonces el otro motor de gasolina; un 3.0 de 306 caballos de potencia con 400 Nm entre 1.300 y 5.000 r.p.m. Se llamará X6 xDrive 35i. Respecto a los diésel, se ofertarán otros dos motores: un 3.0 L de 235 CV y un 3.0L de 286 CV. ¿Sus nombres? xDrive 30d y xDrive 35d respectivamente.
Fuente:El mundo.es
Fecha:21/12/2007

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