Está claro que la crisis económica no perjudica a todos los sectores empresariales. Es el caso del fast food que, gracias a esta situación, ha aumentado de forma considerable su demanda en la mayoría de los países. Por ello, enseñas como Kentucky Fried Chicken pretenden aprovecharse de ello. Así, esta enseña norteamericana prevé crear 9.000 puestos de trabajo en los próximos cinco años, tras la apertura de 300 nuevos establecimientos.
Mientras la mayoría de los mercados de la industria y la automoción están viéndose afectados por los severos recortes de personal registrados en el último año –incluido el sector de la hostelería–, las cadenas de comida rápida han visto en esta situación una gran oportunidad de crecimiento, permitiéndoles así ampliar su capacidad para los próximos años.
Fue McDonald’s, la primera compañía en anunciar durante el 2008 su propósito de incrementar personal y unidades, dejando al descubierto la buena situación por la que atraviesa el sector tras obtener un beneficio del 80% mayor que el del año anterior. Ahora es el turno de KFC, que prevé aumentar en un tercio –alrededor de 280 establecimientos– el número total de restaurantes en Reino Unido, cifra que asciende a 760 establecimientos en este país. El 38% de ellos está gestionado directamente y, el resto, bajo la fórmula de franquicias.
La compañía del Coronel Sanders ha admitido que sus resultados, dentro de la actual situación de recesión, presentan notables beneficios, gracias a que cada vez más personas se decantan por comida más barata. Asimismo, KFC ha sido capaz de ganar cuota de rivales como McDonald’s, la mayor cadena de restaurantes de comida rápida del mundo.
Con un total de 22.000 empleados trabajando en Reino Unido, el incremento en 9.000 para el próximo quinquenio supone para KFC un incremento del 40% de su fuerza laboral, que prevé, paralelamente, abrir 44 restaurantes este año, ocho más que en 2008.
Fuente:http://www.tormo.com
Fecha:18/02/2009
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